El hielo congela tu fuego esquizofrénico, el mismo que se desliza por las paredes buscando remover los cimientos de la clara luna suspendida entre tus sueños y el helado suelo en el que la realidad entierra las esperanzas mas inocentes... espera... el viento trae buenas nuevas para los que se olvidaron los ropajes de individuo y sociedad en el armario del pasado, para aquellos que siguen sintiendo con la cabeza y caminado con las manos en este suelo de espuma, para esos que no tardan en desdibujar la mentira saboreando la miel de la locura, para esos que los demás han olvidado y que la realidad ha sepultado bajo esquirlas de un teatro más sádico que la propia vida. La buena nueva es que no estan solos, tienen un ejercito tras ellos queriendo decapitarlos, un ejército despechado por que les han quitado la felicidad de la ignorancia, un ejército que llora por que les devuelvan la venda que sacia el hambre de su razón inquieta. Su mente se ha vuelto un animal dificil de saciar y la necesitan desterrar para siempre, junto con esos otros seres que viven desnudos, presos de la razon, a los cuales buscan con ansias borrar de la escena drámatica en que toda nuestra vida se ha quedado estancada.