domingo, mayo 21, 2006

Recordando

El poema escrito a continuación no lo escribí yo, sino que alguien me lo dedicó, la verdad es que no le pedí su autorización para ponerlo en mi blog, pero re-leyendo mi mail me emocionó hasta las lágrimas encontrarme con estas letras... me ayudó a revivir una epoca bastante triste, pero que me ayudó muchisimo, por decirlo de alguna manera me permitió constatar en carne propia que no existe la felicidad por siempre... pero tampoco el dolor dura eternamente, sino que ambos se dedican a ocilar constantemente llevandonos con ellos en un sube y baja que termina por delatarnos la escencia de nuestra existencia.


Cuando mires hacia atrás
y el mar esté llorando,
cuando atisbes el futuro
y la luz parezca lejana,
quita el cerrojo de mi cadena,
libérame, porque estoy en ti.

Valles, planicies, montañas.
La arena no cae en vano
y la más dura de las rocas
no es nada ante el paso de las nubes.

Vivo aun enredado en tus cabellos,
más largos que el delgado hilo del tiempo.
Pronto seguiré el camino de Teseo
y tras el laberinto del espacio amenzante
retornaré a morar en ti piel
a vivir entre tus brazos.